¿Qué genocidio hubo en América?

 


¿Qué genocidio hubo en América?

¿Es verdad que los españoles pudieron liberar a los mexicanos indígenas de los aztecas que los tenían acechados?

 

Por Pepe Toisa

Hernán Cortés liberó a las tribus mexicanas de la tiranía del Imperio azteca. Lo que ocurre es que la historiografía mundial no puede soportar que la mayor hazaña de la humanidad fuera realizada por españoles que se mezclaron con indígenas.

Este es el relato de un continente hostil, de unos barbudos fieros y astutos, de la luz sobre Europa, del mayor mestizaje de la historia y, por desgracia, también de una leyenda inventada para esconder lo que realmente ocurrió: cuando los españoles estuvieron en América algunos lugares vivieron el momento de paz y de bonanza económica más grandes de su historia.

Hernán Cortés es el padre de México, se quiera o no, y el país actual no se puede entender sin él. Él amó profundamente México y liberó a todos los pueblos sometidos por la tiranía y la brutalidad de los aztecas. Nada más conquistar un pueblo, los aztecas esclavizaban a hombres y mujeres de forma extrema. Cuando los españoles empezaron a vencer y mostraron que no iban esclavizando a su paso, las tribus mejicanas se unieron a su lucha. No reconocer eso es un insulto a la memoria de todos y especialmente a los mejicanos herederos del mestizaje.

A la muerte de Moctezuma, la leyenda negra nos ha contado que toda su familia fue exterminada. Esto es falso. Cortés cuidó a sus descendientes e incluso tuvo un hijo con una de sus hijas. Además, la Corona les dio pensiones vitalicias a varios caudillos aztecas y, en general, veló por los vencidos y los introdujo en la nobleza española. El testamento de Isabel La Católica y las Leyes de Burgos de 1512, que es el primer instrumento legal para proteger a los indígenas de un pueblo conquistado, demuestran la preocupación española por los vencidos. España quería que esos indígenas formaran parte de las nuevas sociedades, a diferencia de los anglosajones.

El Descubrimiento y Conquista de América es el hecho más importante de la historia universal. España sacó con este hecho al resto de Europa de sus tinieblas y se convirtió por ello en la potencia mundial, puesto que hasta entonces el Imperio Otomano llevaba la voz protagonista. Con el Descubrimiento y Conquista de América se produce la mayor unión de razas y culturas jamás vista. Y no solo sacamos a Europa de la oscuridad, sino que América pasó de la Edad de Piedra, en la mayoría de los casos, y la Edad de los Metales, en los menos, a evolucionar en 50 años hasta la Edad Moderna. Eso no ha sucedido en ningún lugar del mundo, y no hay ninguna experiencia de mestizaje de esas dimensiones. No olvidemos que España tiene el honor de haber fundado más de 1.000 ciudades. Muchas de ellas son patrimonio de la humanidad.

Las Leyes de Burgos, que insistían en que los indígenas no podían ser explotados, fueron precursoras dentro del derecho internacional. Las Leyes de Burgos es el primer texto legal que protege a los indígenas de un país conquistado y prohíbe expresamente la esclavización. Esto ocurre 300 años antes de la Revolución francesa o la Guerra de Independencia de EE.UU. Leyes tan progresistas que incluso otorgaban a las mujeres tres años de derecho de maternidad para cuidar a sus hijos. Los españoles se adelantaron en materia de derechos humanos al resto de naciones y consideraron casi desde el principio a los indios como súbditos y no como esclavos. En este sentido, es verdad que existieron las encomiendas, aunque tienen más que ver con las servidumbres medievales que con la esclavitud. En Europa se vivía todavía en regímenes de servidumbre en muchos lugares, y nadie los consideraba a ellos esclavos.

Los anglosajones, por el contrario, no buscaban crear una sociedad nueva como los españoles, simplemente trasladaron e impusieron su sociedad a América. Los puritanos eran religiosos radicales que usaban la Biblia a su antojo. El indio no era un ser humano para ellos. El negro y el irlandés fueron sus esclavos. Esa diferencia entre unos y otros es lo que la historiografía anglosajona ha querido ocultar, para hacer olvidar que donde han estado han exterminado a todas las razas aborígenes y esclavizado a quien no era como ellos. Su forma de explotar a sus pueblos es parasitaria; sus colonias son factoría.

Me provoca rechazo intelectual cada vez que gente ignorante y malintencionada repite mucho la idea del supuesto genocidio cometido por los españoles con argumentos casi infantiles: "hubo un genocidio, los españoles mataron a los indios, violaron a las mujeres y se llevaron el oro". No obstante, lo primero que invalida la teoría del genocidio es que hasta avanzado el siglo XVI los españoles eran muy escasos, es decir, estaban en una inferioridad numérica que no daba lugar a una acción así. Por otro lado, su afán de mestizaje es evidente casi desde el principio, porque daban su apellido a los hijos nacidos de relaciones entre europeos y americanos.

Nos han contado el mito de que los españoles tenían una superioridad tecnológica tan enorme que parece que iban con naves espaciales y metralletas de repetición. Eso es falso. Estaba la superioridad que daba el caballo, el acero y los perros de la guerra, pero la victoria se consiguió por hombres de una gran valentía y una inteligencia increíble. Las personas que les acompañaban venían de luchar en los tercios en Europa y eso les hacía los mejores soldados del mundo. Los indígenas, por el contrario, lo que tenían de su lado era la superioridad numérica, un clima hostil a los españoles, grandes cordilleras, guerras civiles y enfermedades autóctonas. Para superar todas estas dificultades, los españoles tuvieron que concebir en pocos años un número de héroes que algunos países jamás podrán reunir en toda su historia.

En materia económica, España no dejó expoliado el continente, que sigue siendo el lugar con más recursos naturales del mundo. Durante los siglos XVI, XVII y XVIII algunos lugares vivieron el momento de paz y de bonanza económica más grandes de su historia. De hecho, la riqueza de la América Española era muy superior a la de EEUU a principios del siglo XIXHispanoamérica era la zona más rica del mundo y la separación de España y sus consecuentes guerras civiles provocó una involución de 100 años.

En cuanto al oro, la mayoría estaba en manos privadas y al rey sólo le pertenecía el diezmo real o lo que actualmente llamamos los impuestos del estado. Se conoce, por los Archivos de Indias, que en Sevilla se desembarcaron 186.000 kilos de oro hasta finales del siglo XVII. Actualmente, sólo Perú exporta más de 2000 toneladas de oro cada año, once veces superior a las 186 toneladas que llegaron a Sevilla en casi dos siglos.

La idea del genocidio se ha extendido como la COVID en la opinión pública española y latina. Sin embargo, hay que enseñar en ambos lados del charco el contexto y la historia sin complejos. Lo que no se puede hacer es manipular con intereses políticos y populistas esa historia con el fin de que esos pueblos hermanos se queden huérfanos de su pasado. Un pueblo huérfano y que desprecia su historia es un pueblo sin futuroEsta manipulación solo beneficia a unos pocos políticos y no beneficia a la gran sociedad hispana.

Ahora es importante dar a conocer esta historia y proporcionar argumentos para combatir la leyenda negra. Convencer a los populistas es más difícil. Primero enseñemos la historia de los conquistadores y acabemos con el mito de que los indios que vivían allí eran monjitas de la caridad. Después, aprendamos que los 300 años de la América Española fueron tiempos de paz y prosperidad. Finalmente, comprendamos que la historia la hacen las personas y éstas cometen errores de los que hemos de aprender. Lo que no vale, ni es útil, es reinterpretar la historia para que diga lo que no dice.

 



No hay comentarios:

Publicar un comentario